La enzima de la eterna juventud
Toda la información genética de nuestras células están en los cromosomas, concretamente en el ADN. Las células se dividen unas 50 veces durante su vida. El sistema de protección para que quede intacto el ADN durante la división celular, son los denominados telómeros.
Los telómeros son unos capuchones en la parte final del cromosoma, están formados por ADN repetitivo. Cada vez que una célula se divide, los telómeros se acortan. Protegiendo así que la información del ADN quede intacta. Podemos hacer el símil con una goma que sujeta una trenza, cuando se rompe la goma, la trenza se deshace. Los telómeros serian esas gomas, que sujetarían el ADN. Con el tiempo, los telómeros son tan cortos que la célula sufre un envejecimiento celular, degradándose y no dividiéndose.
La edad biológica puede que no coincida con la cronológica
Este acortamiento telomérico provoca el envejecimiento de las células y problemas de salud, como enfermedades neurodegerativas o cardiovasculares. Los tejidos más afectado por esta degradación de los telómeros son los de la piel, el cabello y el sistema inmunológico, porque se reproducen con más frecuencia. El desgaste de los telómeros puede aumentar el riesgo de sufrir cáncer. Las células cancerosas pueden utilizar células degradadas para replicarse y hacerse inmortales.
Hay una sustancia que repara los telómeros, de denomina la enzima telomerasa. Ralentizar, detener o incluso reverte el acortamiento de los telómeros, que ocurre a medida que envejecemos.
La telomerasa esta presente en le desarrollo embrionario, pero cuando nacemos dejamos de sintetizarla en la mayoría de las células, y a medida que envejecemos va desapareciendo. Exponer la telomerasa a las células humanas, alarga los telómeros y consigue retrasar el envejecimiento de las células, ya que les permite que comiencen a copiarse de nuevo. Las células funcionan como si fueran más jóvenes.
Se cree que hay un 20% de factores hereditarios y un 80% de factores ambientales, que controlan este acortamiento de la telomerasa. Entre los factores en que podemos reducir el reducir el acortamiento de los telómeros, se encuentran medidas como la de reducir el estrés, dejar de fumar, perder peso, hacer más ejercicio y llevar una dieta más saludable.
Entre los suplementos nutricionales que se han demostrado eficaces para activar la telomerasa y alargar los telómeros, está el TA-65®. Una década de estudios avalan su seguridad y eficacia. Ha sido probado en todo el mundo con unos buenos resultados, evitando que se acelere el proceso de envejecimiento natural a nivel celular.
El principio activo del TA-65®, es el Cicloastragenol que es una substancia que se ha aislado de varias especies de leguminosas del género Astragalus. Se ha demostrado con estudios en células T CD4 y CD8 humanas, que es capaz de activar la telomerasa. Evitando el envejecimiento celular.
TA-65® está formulado con un patentado proceso, que evita que se digiera su principio activo en el estomago y llegue a la sangre, aumentando la absorción en las células. Ningún otro producto utiliza esta tecnología patentada.
Modo de empleo: |
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De 25 - 50 años |
1 cápsula |
De 60 - 70 años |
2 cápsulas |
A partir de 70 años |
2-4 cápsulas |
Para mejorar su eficacia, se debe tomarse en ayunas. No superar las dosis recomendadas. No debe utilizado en personas menores de 25 años.